Sierra de la Mosca. Riqueza ornitológica

Abejaruco (Merops apiaster)

Cuando allá por los años 90 y por circunstancias de la vida fui a parar al municipio de Sierra de Fuentes (a unos 12km de la ciudad de Cáceres) era apenas un crío, y la primera imagen que recuerdo y no se me olvidará fue la vista desde la carretera de entrada al pueblo de El Risco y la falda de la Sierra de la Mosca, un alcornocal que le da verdor a estos llanos infinitos; un pequeño Monfragüe al lado de la ciudad de Cáceres lleno de vida y biodiversidad.


En este humilde articulo quisiera contar de una manera entretenida una pequeña parte de la riqueza faunística, en este caso ornitológica, del enclave la Sierra de la Mosca. Dicha sierra se encuentra entre las localidades de Cáceres y Sierra de Fuentes, y es un sistema de poca altitud, de unos 25-30 km de longitud total. Como antes he mencionado el sustrato predominante es el alcornocal coronado por varios roquedos de diferente morfología; rodeando este alcornocal zonas adehesadas de encinas, algunos olivares, etc. También podemos encontrar en los valles manchas de madroños, espino albar, acebuches, coscoja, algún roble, incluso castaños y algunos bosquetes de pino piñonero. En cuanto a matorral predominante encontramos jara pringosa, brezos, retamas, romero, cantueso, torvisco  etc. En definitiva, nos encontramos con un ecosistema de bosque mediterráneo esclerófilo.

No está de más mencionar que esta sierra se encuentra rodeada por varios km de llanos que se utilizaron de manera tradicional para la agricultura de secano y el pastoreo, sobre todo ovino. Hoy en día la mayoría de esta extensión es utilizada para el ganado, principalmente ovino y bovino; aunque quedan todavía extensiones para la agricultura, la ganadería le está ganando terreno.

También se debe citar las masas de agua más importantes. Cabe destacar que esta sierra, por su morfología geológica actuando como un colador y depósito en el subsuelo, tiene un importante cúmulo de agua subterránea que aflora en diferentes puntos de Cáceres y de Sierra de Fuentes. En el valle de Valdeflores, en Cáceres, aflora el principal caudal de agua de la ciudad la Ribera del Marco. Por otro lado podemos encontrar dos masas de agua embalsadas: el Pantano de Guadiloba al norte y la presa del Salor al sur.

Después de tener el enclave ya definido, podemos hacernos una idea del tipo de biodiversidad que puede albergar. En cuanto a aves, en la cúspide de la cadena trófica encontramos dos que destacan por encima de las demás; obviamente dos rapaces: el Águila perdicera (una pareja ocupa un roquedo desde hace ya bastantes años, habiendo obtenido éxito reproductor algún año), y el Búho real, del que quizás haya tres o incluso más parejas en la sierra. En El Risco se tienen indicios de su reproducción años atrás, aunque actualmente no lo he podido comprobar.

Águila perdicera (Aquila fasciata)
Águila perdicera (Aquila fasciata)

Siguiendo con rapaces, allá por mediados del mes de marzo, tenemos la visita del Milano negro el cual forma varias colonias de cría con más de 40 parejas reproductoras. El Águila calzada, con su reclamo característico, nos deja clara su presencia. De cuatro a seis parejas crían en esta sierra, teniendo constancia de que vuelan bastantes pollos todos los años.

Águila calzada (Hieraaetus pennatus)

Milano negro (Milvus migrans)
Milano negro (Milvus migrans)

Un poco más avanzada la primavera se presenta otra rapaz fascinante: la Culebrera. Unas tres parejas se reproducen aquí todos los años.
Por último cabe citar al denominado por Félix Rodríguez como "Buitre sabio". Como todos sabéis es el Alimoche; varios ejemplares surcan estos cielos.  Yo he podido constatar la presencia de dos nidos de esta especie.
Otras especies como el Águila real o Águila imperial no anidan aquí, (quizás algún día puedan hacerlo) pero es fácil observarlas de paso hacia sus cazaderos, que son colindantes a la sierra.

Cómo hacer comederos caseros para aves

Comederos de rollo de papel de sebo
Comederos de rollo de papel de sebo

En la naturaleza, la comida no acostumbra a ser tan abundante como uno podría pensar, sobretodo cuando llegan los meses más fríos algunas aves les cuesta encontrar la comida necesaria. Ofrecerles un suplemento energético con poco esfuerzo puede ahorrarles algunas dificultades y así también nos permite poder observarlas de cerca y aproximarlas a nuestro entorno.
Aunque los comederos se pueden realizar en cualquier época del año se aconsejan sólo en los meses de octubre a marzo.

Son muchas las aves que pueden beneficiarse del aporte extra de comida, aunque el tipo de pájaros variará según el lugar dónde se encuentre nuestro comedero y el tipo de alimento (semilla, grana o fruto seco) que le pongamos. Tenemos que escoger el lugar idóneo y con un poco de paciencia veremos que poco a poco acudirán a diario a nuestros comederos.
Nuestro objetivo será realizar varios tipos de comederos diferentes, con material muy sencillo y de fácil construcción.

Comederos de rollo de papel de sebo
Éstos son los comederos más fáciles de hacer, sobretodo con niños.
Material: un rollo de papel de váter, mezcla de semillas de grano pequeño (colza, cáñamo, negrillo, alpiste, mijo...) manteca de cerdo o otra grasa similar y un cordel
1. Cogemos la manteca de cerdo y la untamos uniformemente en el rollo de váter (si está muy dura la deshacemos al baño maría).
2. Podemos las semillas en un bandeja y hacemos rodar el rollo de váter de manera que las semillas se queden enganchadas en él.
3. Añadimos un cordel que atraviese el rollo y ya está listo para colgar.


Comedero de granas y semillas con mallas
Son los comederos más simples de hacer y mantener,  y los más económicos a nivel de alimento.
Material: malla reutilizable de ajos, cordel y semillas de girasol.
Procedimiento:
1. Cogemos la malla, en nuestro caso hemos utilizado una malla de ajos secos (en función del tamaño de la malla, escogeremos la grana y las semillas, para evitar que se cuelen por los agujeros).
2. Pondremos las semillas de girasol y haremos una bola compacta. La ataremos por el extremo con el cordel.
3. Una vez lista, la ataremos en la rama de un árbol o en la barandilla del balcón.

Comedero de granas y semillas con mallas
Comedero de granas y semillas con mallas

Comederos tubulares de frutos secos
Son los comederos más complejos de hacer y requieren más tiempo, aunque con menos de una hora los tienes hechos. 
Material: malla metálica (según la luz de malla pondremos frutos más grandes o más pequeños), alicates, bridas, cordel, una tapa de bote (8cm de diámetro), un plato de plantas (15cm de diámetro), pistola de silicona y taladro.
Procedimiento:
1. Recortaremos un rectángulo de malla metálica 15x26cm. Las medidas estarán en función del diámetro de vuestra base. La uniremos en forma de rollo tubular por los extremos horizontales y las fijaremos con unas bridas. Cortaremos el restante de brida.
2. Una vez preparado el contenedor lo uniremos a la base, en nuestro caso un tapa de un pote de conserva. Haremos dos pequeños agujeros y ataremos el contenedor de malla a la base mediante unas bridas. Si os queda poco sujeto y el alimento puede caer, podéis fijar toda la base con pistola de silicona.
3. En la parte superior del contenedor pondremos un plato de plástico de plantas de mayor diámetro que el tubo para cerrar el tubo y para que también haga de protector de la lluvia. Para unirlo, le haremos dos pequeños agujeros y así fijarlo a la base con dos cordeles a modo de que la tapa se pueda abrir y cerrar fácilmente.
4. Para acabar le pondremos una anilla o un cordel para colgarlo.

Comederos tubulares de frutos secos
Comederos tubulares de frutos secos

Comederos con colgadores de sebo
Seguiremos el mismo procedimiento que con los comederos de rollo de papel con sebo.
Material: moldes, mezcla de semillas de grano pequeño (colza, cáñamo, negrillo, alpiste, mijo...) manteca de cerdo o otra grasa similar y un cordel.
Procedimiento:
1. Ponemos un puñado de mezcla de semillas en cada molde.
2. Cogemos la manteca de cerdo y la fundimos al baño maría para sí mezclarla con las semillas de los moldes.
3. Les ponemos un trozo de cordel para que cunado solidifique se quede unido al sebo. Podemos acelerar el proceso poniendo los moldes en el congelador.

Comederos con colgadores de sebo
Comederos con colgadores de sebo

Comederos naturales
Material: no precisan de material concreto, solo las semillas.
Procedimiento:
Simplemente consiste en tirar las semillas por encima de los cardos secos. Los fringílidos son las aves que más acuden a esta planta.

Comederos naturales
Comederos naturales

Comederos sarta de cacahuetes
Material: cacahuetes enteros naturales, aguja gruesa (lanera) e hilo de pescar.
Procedimiento:
1. Cogeremos el hilo de pescar y le haremos un nudo al extremo inferior.
2. Enhebraremos la aguja y la pasaremos cacahuete a cacahuete, de forma que nos quedará un colgante para colgar en la rama de un árbol.

Comederos sarta de cacahuetes


Artículo e imágenes: Erika Sanfidel
Blog: http://palspedrespinyes.blogspot.com.es/
Twitter: https://twitter.com/naturainens 
Instagram: https://www.instagram.com/palspedrespinyes/


 

Entrevista a Sergi Sales, récord Big Year en Catalunya

Sergi Sales
Sergi Sales

En esta ocasión tenemos el placer de entrevistar a Sergi Sales, un gran ornitólogo que en el año 2017 ha batido el récord de especies observadas únicamente en Catalunya, con un total de 334 especies. Todo un acontecimiento.


- Este 2017 has conseguido el mayor "Big Year" registrado en Catalunya, con 334 especies de aves distintas. Cuál era el anterior récord a batir?
La mejor marca que estaba documentada era de 322 especies, que es de por si un gran registro.

- No es nada fácil alcanzar una cantidad tan estratosférica en un solo año y en un entorno tan reducido, como es Catalunya. Cómo planificaste este Big Year?
Pues fue por varias etapas. Después de visitar el Delta del Ebro y sumar una gran cantidad de especies poco habituales, decidí intentar batir el récord de Big Year de enero. Una vez conseguido este reto deje pasar la primavera y después decidí si valía la pena intentar-lo. Afortunadamente pude encontrar muchas rarezas y relocalizar la mayoría de las que habían encontrado otros ornitólogos. A partir del mes de septiembre sí que fue una operación de precisión más "quirúrgica", planificando fecha y lugar para cada una de las especies que necesitaba.

Sergi Sales
Sergi Sales durante una jornada de anillamiento

- Precisamente el hecho de tratarse de un territorio relativamente reducido te permitía visitar muchas zonas de forma recurrente. Cuáles han sido los lugares más visitados?
Afortunadamente tengo un trabajo que me permite pasar muchas horas en el campo y visitar lugares muy diversos. Por trabajo las zonas más visitadas han sido las estepas de la Plana de Lleida y l'Estany d'Ivars - Vila-sana.
Estrictamente para el Big Year seguramente fue el Delta del Ebro, especialmente porque me costaron muchas especies como la serreta mediana (Mergus serrator) y también los Plans de Sió, ya que necesité 15 visitas para ver el águila imperial ibérica (Aquila adalberti). 

- También habrían sido necesarios desplazamientos más largos en busca de zonas más aisladas. Cuáles fueron los desplazamientos marcados como obligatorios?
Obligatorios serían la búsqueda de especialidades de alta montaña, como el urogallo (Tetrao urogallus), la perdiz nival (Lagopus muta), ... y sobre todo el pico mediano (Leiopicus medius) en el Valle de Aran. Pero en un Big Year para récord siempre hay quilometradas improvisadas en pocas horas para detectar rarezas, como fue la curruca sarda (Sylvia sarda) en el Montseny o la agachadiza real (Gallinago media) en el Empordà.

- Para alcanzar 334 especies, aparte de poder observar todas las especies habituales y algunas de poco frecuentes, tendrás que haber observado distintas especies muy raras. Cuál ha sido el top 5 de rarezas?
De las rarezas que he encontrado podrían ser: Halcón borní (Falco biarmicus), el vencejo moro (Apus affinis), cerceta americana (Anas carolinensis), alzacola rojizo (Cercotrichas galactotes) y el escribano pigmeo (Emberiza pusilla). Personalmente me satisface enormemente que haya detectado hasta 14 aves raras en Catalunya por mi cuenta y no limitarme a relocalizar especies ya observadas por compañeros.

Halcón borní (Falco biarmicus)
Halcón borní (Falco biarmicus) - Imagen de Sergi Sales

Vencejo moro (Apus affinis)
Vencejo moro (Apus affinis) - Imagen de Sergi Sales

Escribano pigmeo (Emberiza pusilla)
Escribano pigmeo (Emberiza pusilla) - Imagen de Sergi Sales

- Y, por contra, cuál ha sido la especie con la que te has cruzado de forma más habitual?
Probablemente los ubiquistas carboneros y herrerillos, especialmente carbonero común (Parus major)

Nuevos retos para la conservación del oso cantábrico

Osos pardos (Ursus arctos) en la Cordillera Cantábrica
Osos pardos (Ursus arctos) en la Cordillera Cantábrica

En los últimos años, los censos de oso cantábrico vienen mostrando la recuperación  paulatina de esta especie emblemática. En 2016 se detectaron 40 osas con 67 crías en las dos subpoblaciones de la cordillera, lo que supone consolidar el récord de osas de 2015. Así, no menos de 250 osos viven ahora en la cordillera, alejando a la especie del peligro crítico de extinción de principios de los 90, con apenas 70-90 ejemplares en dos núcleos sin conexión. Además de las cifras demográficas, los estudios genéticos publicados en 2016 muestran una creciente comunicación entre ambas subpoblaciones realizada sobre todo por machos occidentales que han atravesado al núcleo oriental. Y los datos que la Fundación Oso Pardo (FOP) ha recogido en 2017 en un proyecto para poner a punto nuevos métodos de estudio genético confirman este extremo. Estamos asistiendo al final de un aislamiento genético entre las dos subpoblaciones cantábricas que ha durado quizás cerca de un siglo.

Oso pardo (Ursus arctos)
Oso pardo (Ursus arctos)

Los datos son, pues, buenos. Pero conviene no dejarse llevar por el optimismo. En primer lugar porque el oso cantábrico sigue estando en Peligro de Extinción de acuerdo con los criterios de la UICN y reconocido como tal en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. Conviene dejarlo claro porque en algún sector ha comenzado a escucharse que “hay demasiados osos”, y esto, desde luego, no es cierto.  Por otra parte la buena evolución demográfica tiene aún asignaturas pendientes: los magníficos bosques de Ponga y Redes en Asturias, y de Mampodre y Sajambre en León, no terminan de ser ocupados por osas con crías, a pesar de la buena calidad de hábitat de esos territorios;  también es necesaria una presencia más estable de ejemplares en el corredor entre las dos subpoblaciones, así como  la consolidación de la expansión de los osos al sur de la A6 en León y Lugo.

Oso pardo (Ursus arctos)
Oso pardo (Ursus arctos)

Pero es verdad que nos encontramos ante nuevos retos debido al aumento del número de osos:  por un lado, algunos ejemplares se dejan ver con más frecuencia y el potencial de conflicto se incrementa, aunque no hay evidencias de aumento de daños al ganado. Por otro, asistiremos cada vez más a casos como el del osezno de Liébana, que tuvo que ser capturado por la administración al buscar alimento

Hide Bordas

Herrerillo común (Cyanistes caeruleus)
Herrerillo común (Cyanistes caeruleus) - Imagen de Antonio Rojo

El hide o observatorio de pájaros Bordas se inició hace dos años, una iniciativa de Antonio Rojo (amante de la naturaleza, la fotografía y los pájaros). Podéis conocer sus excelentes fotos en https://www.flickr.com/photos/arojo/, muchas de ellas hechas en el mismo hide Bordas.

Disponemos de todo tipo de comederos: desde simples platitos con comida, comedores de forma tubular, basket ball para poner bolas de sebo, mini cañas de bambú perforadas para que salga el agua de lluvia donde ponemos los tenebrios. Disponemos de variedad de comida para atraer a diferentes variedades de aves: manteca de cacahuete, bolsas de semillas con pipas, cacahuetes, negrilla, sobao pasiegos…. Este año como la cantidad de aves es superior a años anteriores, no nos falta poner ni tenebrios, ni mantencas, ni sobaos.

Mesa con comederos y posaderos para fotografiar aves
Mesa con comederos y posaderos para fotografiar aves

Todo está situado encima de una mesa de madera de huerto urbano sin hortalizas, con tierra y plantas ornamentales. Y detrás de la mesa a la distancia correcta tenemos una casita, un hide para sentarse dos personas y poder poner el objetivo y hacer fotos cómodamente. Alrededor de la mesa, cantidad de árboles y arbustos. No falta un bebedero para beber y poderse bañar.

Hide Bordas
Hide Bordas

Acompañado de todo tipo de elementos estéticos. Al estar en un garden  disponemos de muchos recursos: piedras de todos los tamaños y colores, musgos, troncos, ramas, plantas ornamentales de todo tipo, flores cortadas….. Como también tenemos facilidad de plantar cualquier planta para atraer ciertas aves como es el caso de cardos para los jilgueros.

El entorno es muy favorable pues este garden dispone de 5 hectáreas de jardín, con muchísimas plantas a la venta y otras que hace años que están establecidas formando jardines. También un huerto urbano de tamaño considerable y varios hoteles de insectos. También influye que el garden se sitúe dentro del Parque Agrario del Baix Llobregat.
Además el observatorio está situado en la zona más tranquila del garden, en un espacio importante, aislado, donde los clientes no pueden entrar.
Son varias también las cajas nidos que se encuentran por el garden.


El observatorio tiene mucha actividad especialmente a finales de otoño y sobre todo en invierno y principio de primavera. En verano tenemos muy poco movimiento pues a pesar de disponer de agua en el hide, los pájaros encuentran agua por todo el garden porque evidentemente no paramos de regar y cuando llueve fácilmente se almacena el agua. No les hace falta dirigirse al observatorio.

Hasta hoy hemos visto: lúgano, verdecillo, pinzón común, pinzón real, carbonero común, herrerillo común, herrerillo capuchino, petirrojo, mirlo, chochín, abubilla, gorrión común, gorrión molinero, arrendajo común, tarabilla común, verderón, jilguero y agateador.

Petirrojo (Erithacus rubecula)
Petirrojo (Erithacus rubecula) - Imagen de Antonio Rojo

Para venirlo a visitar, hace falta pedir hora al 93. 638.17.80. Preguntar por Lia. Disponemos de un grupo de WhatsApp, donde todo aquel que viene puede comentar que aves ha visto y enseñar, si quiere, las fotos que ha hecho. Es un servicio gratuito del Garden Center Bordas Gavà (Avda. del Mar s/n) Gavà. Sólo es necesario sacarse la tarjeta de cliente que es gratuita.
Bienvenidos al #hidebordas

Fotografiando limícolas y aves marinas

Correlimos gordo (Calidris canutus)
Correlimos gordo (Calidris canutus)

Mi nombre es Pablo Fernández Pérez. Nací en Gijón, en 1981, y llevo en esto de la fotografía de naturaleza desde el año 1996, aproximadamente. Año en el que con unos ahorrillos, me decidí a comprar una réflex, aún analógica, junto con un modesto 70-300. La idea no era otra que realizar fotos testimoniales que acompañaran a mis apuntes en las salidas de observación. Con el tiempo, la cámara fue ganando peso respecto a los prismáticos y, allá por el 2002 o el 2003, di el salto a lo digital. Tanto es así que a día de hoy estoy trabajando con una Nikon D7200 y un Sigma 150-500 como equipo principal.

Me gusta fotografiar todo aquello que sea fauna y flora, aunque mi predilección está en los grandes mamíferos y, sobre todo, en las aves. Destacando dentro de éstas las limícolas y las aves marinas. Especialmente, gracias a mi lugar de residencia, Gijón, Asturias, desde donde desplazándome muy poco puedo disfrutar de un buen número de especies de ambos grupos y desde donde también realizamos salidas en catamarán para observar y fotografiar aves pelágicas.

Pero, como todos tenemos algo que nos gusta realizar, más que cualquier otra cosa, dentro de lo que son aves marinas y limícolas me quedo con la fotografía de ésta última familia, mediante lo que llamamos el arrastre (en plan colega), que vendría a ser un tumbi-hide pero sin hide. Es decir, a pelo, sin camuflarse.

El autor fotografiando limícolas en la playa
El autor fotografiando limícolas en la playa

El autor fotografiando vuelvepiedras
El autor fotografiando vuelvepiedras

Trabajar con Limícolas
Paso a contaros mi forma de trabajo con estas aves. En mi zona contamos con individuos de distintas especies de esta familia desde agosto, más o menos, hasta mayo, de forma continuada ya que, además de las especies migratorias que descansan aquí, en los pasos prenupcial y postnupcial tenemos como invernantes, principalmente a los Vuelvepiedras y a los Correlimos Oscuros. Aunque algún invierno tenemos suerte y nos acompañan ejemplares de otras especies, como por ejemplo Aguja Colipinta o Archibebe Claro.

Aguja colipinta (Limosa lapponica)
Aguja colipinta (Limosa lapponica)

Archibebe claro (Tringa nebularia)
Archibebe claro (Tringa nebularia)

Chorlitejo grande (Charadrius hiaticula)
Chorlitejo grande (Charadrius hiaticula)

Chorlito gris (Pluvialis squatarola)
Chorlito gris (Pluvialis squatarola)

El primer paso es escoger un día que amanezca soleado y que la pleamar sea entre las 9 y las 11 de la mañana más o menos. Por qué esta marea? Porque mientras estamos trabajando con ellos la marea está

Fotografiando rapaces

Águila imperial ibérica (Aquila adalberti)
Águila imperial ibérica (Aquila adalberti)

Este artículo, es un breve resumen general sobre la obtención de fotografía de rapaces en total libertad con aguardo.
Detallar el proceso sería muy extenso, además de lo variado de las opciones que hay. Además, seguro que serían muchos los detalles que podrían quedar olvidados a la hora de hablar sobre cómo conseguir imágenes de rapaces, por cuenta propia.

Evidentemente, acudir a un Hide (aguardo) de pago, facilita mucho las cosas, sobre todo, a toda aquella persona que no dispone de un lugar donde llevar a cabo todo el trabajo que se requiere, ni dispone del tiempo necesario para ello.

- Lo primero que debemos hacer, y lo más importante, es el trabajo de campo.
- Lo segundo, una vez localizado el lugar, pedir los permisos oportunos.
- Y lo tercero, ponerse manos a la obra y ser pacientes.

En cuanto a lo primero, no podemos intentar fotografiar una rapaz donde no la hay. Es evidente. En consecuencia, debemos localizar mediante observación, donde vuelan, donde suelen localizarse, y si es posible, zonas donde tienen posaderos naturales, donde cazan etc. Es un periodo para disfrutar del campo y cuanto nos ofrece.

Observando la zona

Hay que observarlo durante un tiempo. Debemos estar seguros de que esa zona es la adecuada, la que ellas habitan. De nada sirve una ubicación ocasional o fortuita.
Cuando estemos seguros de que la zona es la adecuada y tomemos la decisión de usar esa zona como nuestro objetivo, pasaremos a localizar los posibles posaderos. Qué zona nos permite y es adecuada para la instalación del aguardo, que luz tendremos por la mañana y por la tarde, fondos que se obtendrán, etc. Hasta tener claro y con exactitud la ubicación del lugar, que nos permita esa zona concreta. No siempre es la ideal.

Una vez decidido, debemos geolocalizar el lugar para pedir los permisos oportunos. En ellos se aclara que especie nos interesa en esa zona, que lugar exacto es el que se va usar para ello y que tipo de ceba utilizaremos. Normalmente se ceba con conejo en percha. O sea, en una rama, o árbol normalmente despejado, que se preste bien a ello.
Esto es imprescindible, pues sin permisos podríamos tener problemas con las autoridades, que conviertan un trabajo de disfrute y respeto por la naturaleza en todo lo contrario. Por lo tanto, es algo que debe hacerse.

No hace falta decir que hay que sumar a lo dicho el tener siempre presente el código ético del fotógrafo de naturaleza y respetar todo cuanto el propio sentido común nos dicta. Nunca interferir en anidamientos ni invadir espacios que estresen o molesten a los animales. El modus operandi de todo fotógrafo de naturaleza debe ser, si es posible, ver sin ser visto. Dejarse invadir por el entorno interfiriendo lo menos posible.

Resuelto todo lo anterior, comenzamos la tarea.
Primero decidimos que tipo de aguardo usaremos. Portable, natural, fijo, para unas dos tres personas… En este caso, para 2-3 personas.
Hay distintas formas de elaborar un hide de este tipo. Madera, incluso de obra, o, por ejemplo, con espuma proyectada, que es el caso que nosotros usaremos.
Normalmente se usa una superficie o “caja” de tablero fino o cartón resistente, sobre la que proyectar la espuma para que obtengamos la forma deseada, una vez endurecida. La pintaremos mimetizando en lo posible con el entorno sobre el que estará ubicado. Y en su interior, siempre de oscuro.
Posteriormente, ha de recortarse con un serrucho manejable o similar el hueco para la ventana, la puerta, y lo que consideremos necesario. Elementos que colocaremos una vez ubicado en su destino final, fijándolas de nuevo con más espuma y unas bisagras adaptadas, aunque antes probaremos en casa para evitar sorpresas.

Construcción del hide
Construcción del hide

Interior del hide
Interior del hide

La ventana, se debe encargar de cristal espía por supuesto, y es delicada la elección. Si la hacemos realmente “invisible” el problema que tenemos es que se come un par de diafragmas en la exposición, por lo que los objetivos poco luminosos, van a requerir velocidades lentas, o isos altas… Y si lo elegimos invisible, pero para que “se coma” menos luz, no llega a ser del todo invisible el interior y dependes mucho de la incidencia de la luz a ciertas horas, en las que puedes ser muy visible. Habría que ser muy cauto y muy consciente a la hora de moverse y no utilizar elementos claros en el interior. La vista de las rapaces no es precisamente mala… Pero disfrutas de perder menos diafragmas, y poder utilizar zooms o lentes menos luminosas.
De todas formas y sea como sea, ropa oscura y nada de brillos, siempre.

Transporte hasta el lugar idóneo

Fijando el cristal

Vista del hide para fotografiar rapaces
Vista del hide para fotografiar rapaces

Una vez transportado el hide al lugar de instalación, lo colocaremos en el lugar elegido. Instalaremos ya la ventana en su hueco correctamente fijándola con espuma, (tiene una posición correcta) y una vez colocada la puerta, podemos colocar las sillas, ganchos para colgar algún objeto etc. e incluso preparar un espacio fuera cubierto que haga las veces de wc sin ser vistos o lo que consideremos necesario. Ya comenzar la parte fotográfica.

Primeras aves acercándose

Fototrampeo

Lo ideal es dejar un tiempo el hide, bien integrado si es posible, para que se acostumbren los animales a su presencia. Las rapaces suelen ser muy recelosas. Durante este periodo empezaremos a cebar también, y es bueno instalar una cámara trampa para ver qué entra, a qué horas, si repite entradas, etc… Al principio no es raro que no entren al cebo. Bueno, no hay que desesperar. Ya llegará el momento.

Posiblemente, las Urracas, Rabilargos, etc serán los primeros en acudir. Eso es bueno. Son un reclamo para el resto de animales. Llaman la atención, y hacen que la rapaz que buscamos, se centre en ese punto de interés que tanto gusta y altera a estas otras aves.

Urracas (Pica pica)
Urracas (Pica pica)

Una vez cebado un tiempo (depende de la suerte y de lo recelosa de la rapaz) y con la certeza y evidencia de que entra, (visto en la cámara espía y en el cebo) podemos cautelosamente comenzar las sesiones. Además, pasado un tiempo sabremos que especies entran, y puede que nos llevemos gratas sorpresas, que no esperábamos.
Es la parte más emocionante. Sin duda.

Águila imperial ibérica (Aquila adalberti)
Águila imperial ibérica (Aquila adalberti)

Es importante, observar muy bien cuando vayamos a entrar al hide, que no vuelen o estén posadas donde puedan vernos. No acercar coches, etc. No hacer ruido, ni alterar nada del entorno. Algunas, si las asustas o espantas, no volverán. Y una vez dentro, silencio, pues verte quizás no te vean, pero oírte… Moverse lo menos posible y sin brusquedad (sobre todo en cristal no muy reflectante) y estar muy atento. Suelen volar o sobrevolar antes de entrar, y suelen tener querencia a una zona en concreto y a ciertas horas.

Buitre negro (Aegypius monachus)
Buitre negro (Aegypius monachus)

Suelen entrar antes que a la percha, a una piedra, o algo que les permita controlar la situación. Momento que podemos aprovechar para fotografiarlas en un posadero natural, como una roca, que es preferido por muchos fotógrafos. Además nos advierte del vuelo hacia la percha, lo que permite estar preparados y atentos para capturarlo. Las primeras veces es posible que coja el cebo y se lo lleve rápidamente, pero con tiempo, comerá en el posadero. Otras rapaces, como el Azor o el Ratonero, son más impredecibles en su entrada y asiduas también a los cebos. Difícil pillarlos en vuelo de entrada o salida, pero es parte del atractivo de este tipo de fotografía. Y una vez posadas, pueden dar mucho juego posando, mientras consiguen un poco de alimento.
Tenerlas a esas distancias es un placer visual.

Busardo ratonero (Buteo buteo)
Busardo ratonero (Buteo buteo)

Es muy importante no utilizar “nada” que pueda dañar al ave, ni elementos que puedan ser lesivos o dañinos para ellas, así como nada que pueda tragar que no sea el propio cebo. Nada que pueda poner en peligro al ave. No olvidemos que estamos ante aves protegidas, o al menos animales salvajes con muy poco o ningún contacto con el humano. Parte del placer de fotografiarlas es saber que mañana seguirán estando ahí.

Fotos de la primera sesión fotográfica realizada tras poner en marcha el aguardo una vez asegurada la entrada continuada de fauna del entorno. ¡Todo un éxito para ser fotografiado todo esto en la misma jornada, y tratándose de las especies de que se trata!

Lince ibérico (Lynx pardinus)
Lince ibérico (Lynx pardinus)

Aunque no nos hagamos falsas ilusiones. En las jornadas fotográficas, hubo éxitos y momentos de gran disfrute y consecución de imágenes, pero también alguna jornada en blanco. El campo es así, y eso también, forma parte de su encanto.

Artículo e imágenes: Ángel Cañones - Febrero de 2018.

  

Elección del posadero para la fotografía de aves

Picogordo (Coccothraustes coccothraustes)
Picogordo (Coccothraustes coccothraustes)

En un mundo donde el estrés gobierna nuestras vidas, la fotografía de fauna es un oasis de calma, tranquilidad y paciencia, mucha paciencia.
Ya que pasamos mucho tiempo en nuestro ‘hide’, tenemos que aprovecharlo y disfrutar de nuestras sesiones.

Para que nuestras fotografías queden agradables a la vista no sólo depende de la cámara, el objetivo, la luz, el fondo y el ave. No debemos olvidar un complemento esencial que quedará retratado en todas nuestras fotografías: el posadero.

Carbonero común (Parus major)
Carbonero común (Parus major)

Curruca capirotada (Sylvia atricapilla)
Curruca capirotada (Sylvia atricapilla)

Acentor común (Prunella modularis)
Acentor común (Prunella modularis)

Escribano soteño (Emberiza cirlus)
Escribano soteño (Emberiza cirlus)

La elección de unos buenos posaderos garantiza el éxito de una sesión. No es fácil encontrar posaderos que sean verdaderamente útiles y agradables, tanto para nosotros como para las aves, las principales

Pajareando en El Musel (Gijón, Asturias)

Alcatraz atlántico (Morus bassanus)
Alcatraz atlántico (Morus bassanus)

El puerto de El Musel está situado fuera de la ciudad de Gijón/Xixón, en dirección Noroeste, a unos 7 Km. del centro, en la costa de las zonas de Jove, Musel y Campa de Torres.

Puerto de El Musel
Puerto de El Musel
Nos encontramos ante un puerto que combina las actividades comercial y pesquera dentro de sus instalaciones. Por lo tanto, desde hace unos cuantos años se establece un control de entrada por parte de la Autoridad Portuaria. Para nuestra actividad de observación o fotografía de fauna conviene tener un permiso específico para no correr el riesgo de que nos echen del puerto, e incluso de que nos sancionen, a pesar de que al no ser trabajadores portuarios solamente tendremos acceso a dos zonas concretas, que se pueden ver en las fotos. El Muelle Pesquero y la explanada de La Figar.

La Figar - El Musel, Gijón
La Figar

Muelle pesquero - El Musel, Gijón
Muelle pesquero

Vamos a empezar describiendo un poco la zona en la que es más fácil fotografiar especies bastante interesantes, especialmente, de marinas.
Al ser un muelle pesquero, de lunes a viernes hay bastante movimiento de barcos de pesca, muchos de los cuales limpian sus aparejos allí mismo, lo que reúne a su alrededor buenos grupos de Gaviotas y Cormoranes Grandes. Siempre que veamos una pajarera de éstas es conveniente analizarla, por si en ella se encuentra algo interesante… Normalmente los pesqueros de bajura ya llegan al amarre y despescan por la mañana, pero los grandes arrastreros entran casi al anochecer. Es un momento bastante interesante porque, especialmente con temporales, traen detrás de ellos buenas pajareras de gaviotas, pero también Alcatraces, e incluso Págalos y Pardelas.

Otra circunstancia que aprovechan las aves marinas son los peces muertos que se depositan en el fondo después de la limpieza de aparejos y que, en el momento de la limpieza, no fueron comidos por las aves. Es toda una demostración de adaptación por parte de los Cormoranes Grandes e incluso de algún Colimbo Grande, ya que conocen lo que allí hay y se juntan en grupos para “pescar” esos cadáveres. También de parasitismo, por parte de las Gaviotas, que esperan posadas en el agua o en tierra a que algún Cormorán salga a la superficie con pesca para robársela.

Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)
Cormorán grande (Phalacrocorax carbo)

Cormorán moñudo (Phalacrocorax aristotelis)
Cormorán moñudo (Phalacrocorax aristotelis)

Colimbo grande (Gavia immer)
Colimbo grande (Gavia immer)

Foca gris (Halichoerus grypus)
Foca gris (Halichoerus grypus)

Foca gris (Halichoerus grypus)
Foca gris (Halichoerus grypus)

Al ser una zona en donde conseguir el alimento, a pesar de la fuerte competencia, es relativamente sencillo, es un lugar muy querencioso para las Gaviotas y Cormoranes, encontrando siempre algo que echarse a la tarjeta de memoria. Unas veces más y otras menos. También es donde más facilidad tendremos, por la